En la industria de la soldadura, electrodos de tungsteno Se utilizan ampliamente debido a su excelente rendimiento a altas temperaturas y conductividad eléctrica. Sin embargo, los electrodos de tungsteno encontrarán ambientes extremos de alta temperatura y alta corriente durante el proceso de soldadura. Por tanto, la aplicación de tecnología de tratamiento de superficies es particularmente importante. El tratamiento superficial adecuado no sólo puede mejorar significativamente la resistencia al desgaste, la resistencia a la oxidación y la estabilidad del arco de los electrodos de tungsteno, sino que también puede extender efectivamente su vida útil, optimizar la calidad de la soldadura y reducir la aparición de defectos de soldadura. Por lo tanto, elegir el tratamiento superficial adecuado es fundamental para el rendimiento de los electrodos de tungsteno.
Principales tecnologías de tratamiento de superficies.
Tratamiento de oxidación
El tratamiento de oxidación es un método común de tratamiento de la superficie de los electrodos de tungsteno, principalmente mediante la formación de una película de óxido de tungsteno en un ambiente de alta temperatura. Esta película no sólo tiene una excelente resistencia a altas temperaturas, sino que también resiste eficazmente las reacciones de oxidación. Además, el tratamiento de oxidación puede mejorar la estabilidad del arco del electrodo, reducir la vibración del arco durante el proceso de soldadura y garantizar el buen progreso del proceso de soldadura.
Molienda
El proceso de rectificado utiliza medios mecánicos para mecanizar finamente la superficie del electrodo de tungsteno para mejorar su acabado y precisión geométrica. Después del tratamiento de esmerilado, la suavidad de la superficie del electrodo mejora significativamente, lo que ayuda a reducir la inestabilidad del arco durante la soldadura. Los electrodos de tierra generalmente presentan una mejor conductividad eléctrica y una vida útil más larga, y son especialmente adecuados para operaciones de soldadura de alta precisión.
Tratamiento de galvanoplastia
El proceso de galvanoplastia deposita una película de metal o aleación (como níquel, cromo, etc.) en la superficie del electrodo de tungsteno mediante una reacción electroquímica, lo que mejora significativamente la resistencia al desgaste y la resistencia a la corrosión del electrodo. Este método de tratamiento es particularmente importante en aplicaciones donde los medios químicos corrosivos están expuestos durante el proceso de soldadura. Además, el tratamiento de galvanoplastia también puede mejorar las propiedades conductoras del electrodo y mejorar aún más la eficiencia de la soldadura.
Tratamiento de nitruración
El tratamiento de nitruración calienta el electrodo de tungsteno en una atmósfera de nitrógeno para formar una capa de nitruro en su superficie. Este método de tratamiento mejora eficazmente la dureza y la resistencia al desgaste del electrodo y es especialmente adecuado para su uso en entornos de soldadura de alta carga y alta temperatura. Al mismo tiempo, el tratamiento de nitruración también puede mejorar el rendimiento antioxidante del electrodo, extendiendo así su vida útil.
Tratamiento con láser
El tratamiento con láser es una tecnología emergente de tratamiento de superficies que utiliza rayos láser para calentar localmente la superficie de los electrodos de tungsteno, cambiando así sus propiedades físicas y químicas. El tratamiento con láser puede mejorar la dureza de la superficie y la resistencia al desgaste del electrodo, y puede controlar con precisión la profundidad y el alcance del tratamiento para lograr una modificación de la superficie específica. Este método de procesamiento ha ido atrayendo gradualmente la atención en el campo de la soldadura y el corte de alta precisión, mostrando buenas perspectivas de aplicación.
Efecto del tratamiento superficial sobre el rendimiento del electrodo de tungsteno.
Las diferentes técnicas de tratamiento de superficies tienen un impacto significativo en el rendimiento de los electrodos de tungsteno. En primer lugar, el tratamiento de la superficie puede mejorar significativamente la resistencia al desgaste del electrodo y reducir las fallas del electrodo debido al desgaste durante el proceso de soldadura. En segundo lugar, mediante oxidación, nitruración y otros métodos de tratamiento, se puede mejorar eficazmente la capacidad antioxidante del electrodo en ambientes de alta temperatura y se puede extender su vida útil. Además, un tratamiento superficial adecuado también puede mejorar la estabilidad del arco del electrodo y reducir la vibración del arco durante el proceso de soldadura, mejorando así la calidad de la soldadura. Finalmente, ciertos tratamientos superficiales, como el esmerilado y la galvanoplastia, pueden mejorar la conductividad de los electrodos, mejorando así la eficiencia de la soldadura.